Punto 4: EL URBANISMO CERETANO

Punto 4: EL URBANISMO CERETANO

El oppidum ceretano ocupaba una superficie de unos 6000 m2, delimitado por la potente muralla meridional y por la topografía escarpada en las demás vertientes, donde los muros de la parte posterior de las casas conformaban el límite efectivo. Las casas del interior están constituidas por dos estancias: una antesala y una habitación principal en la parte posterior. Están ubicadas en batería, adosadas unas a otras de forma alineada.

Hasta el momento se han individualizado 16 unidades domésticas, todas ellas de planta rectangular y ubicadas en el borde del asentamiento. Haciendo una progresión del número de casas en función de la topografía del altiplano, situándolas radialmente, cabe suponer que había unas 40 casas. Si pensamos que en cada unidad doméstica podían vivir 4 o 5 miembros, nos encontraríamos con una población estimada de entre 150 y 200 habitantes.

Las fincas son bastante homogéneas en cuanto a su estructuración, y no parecen detectarse muchas variantes constructivas, salvo que las del barrio meridional son un poco más grandes que las de levante. Un caso aparte sería una casa de unos 150 m2, posiblemente la residencia de un caudillo; una casa con dos grandes chimeneas de producción comunitaria; y la finca junto a la entrada, con connotaciones religiosas.

Respecto de la parte central, ésta se configura como una gran plaza que articula el anillo de viviendas, y aquí encontraríamos algunos elementos de tipo comunitario. Destaca la presencia de un gran silo para el almacenaje de cereales, sobre todo a partir del siglo iii a. C. Pero también es probable la presencia de una cisterna de agua, zonas de estabulado e incluso zonas de manzanas de viviendas.

Imágenes: Planta estructuras ibéricas zona central en rojo.

Imágenes: Planta hipótesis estructuras ibéricas zona central.

Ilustración: perspectiva axonométrica desde el interior de un tramo de casas adosadas a la muralla con la calle de enfrente.